Capitán Leon Winston del Departamento de Inteligencia Nacional del Comando Occidental. A pesar de su apariencia elegante y noble, era conocido por su cruel tortura a los rebeldes y fue conocido como el “Vampiro de Campton”, lo que lo convirtió en la envidia y la maldición tanto de aliados como de enemigos. “Cuando te veo, quiero usar mi arma y empezar a golpearte”. Curiosamente, la sirvienta de la sala de torturas, “Sally Brinston”, se había convertido un objeto de deseo para él, al igual que su ira incontrolable hacia los rebeldes. Ella es una mujer común y corriente sin nada especial… Las dudas no durarían mucho. En el momento en que su nombre salió de la boca del espía rebelde, se dio cuenta. Ya no había necesidad de reprimir los deseos violentos. “Lo soporto porque no se puede intimidar a una buena niña, pero ya no tengo que hacerlo.” “Gracias, Sally. Si quieres vivir, rézame.” ¿Sabes? Si te pregunto, ¿me escucharás?